
Frente a las antiguas y pesadas baterías de Plomo o las de Níquel Metal Hidruro (NiMH) o Nïquel Cadmio (NiCd), en estos momentos se están imponiendo las baterías de Litio en sus tres variantes principales: ION Litio, Litio Polímero (LiPo) o Litio Fosfato de Hierro (LiFPO4). Entre las múltiples ventajas destacan la menor densidad de energía por cm3 (ahorro de peso), la ausencia de “efecto memoria” y mayor cantidad de ciclos de recarga.